La prepotencia intelectual de los miembros del gobierno Andaluz ha llegado a cotas tales de osadía que tratan a todos los andaluces como analfabetos funcionales y es que por mucho que les pese, aún sabemos contar. Resulta que aprovechando el día de la mujer, el Instituto Andaluz de la Mujer y Andalucía Investiga han emitido una nota de prensa cuyo tercer párrafo me voy a permitir la licencia de reproducir, el título y el texto precedente simplemente es un intento torticero (vamos lo de siempre) de vender un atraso como un avance significativo:
"Asimismo, señaló que, incluso, entre 2007 y 2008 el número de hombres investigadores disminuyó (de 16.143 a 14.671) mientras que la presencia femenina no ha dejado de aumentar año tras año, pasando de 9.567 2007 a 9.777 mujeres en 2008, según los datos de la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa."
Entonces, según el Instituto Andaluz de la Mujer, hemos de estar contentísimos con la política de I+D+I de nuestro gobierno, ya que son 210 mujeres las que se han incorporado a esta actividad en el pasado ejercicio. La parte de la que se supone "no nos vamos a dar cuenta" es que han sido "incluso" (sic) 1 472 hombres los que han dejado de investigar en nuestra tierra en el mismo período, por tanto según los datos de la Consejería de Innovación, en el periodo 07/08 hay 1 262 investigadores menos, pero eso sí, estamos orgullosos.
En una economía globalizada como la nuestra, la creación y mejora de productos es el verdadero hecho diferenciador que hace de una sociedad una potencia económica competitiva, para ello las políticas de Investigación, desarrollo e innovación son imprescindibles y deben ser potenciadas para conseguir un tejido industrial robusto y puntero. Yo personalmente me alegro de que haya más investigadoras, pero no es motivo de gozo que por cada investigador (mujer) contratadao hayan sido despedidos 6 investigadores (hombres) y es que el desarrollo de Andalucía no es una cuestión de sexos, mas bien de hechos...
En una economía globalizada como la nuestra, la creación y mejora de productos es el verdadero hecho diferenciador que hace de una sociedad una potencia económica competitiva, para ello las políticas de Investigación, desarrollo e innovación son imprescindibles y deben ser potenciadas para conseguir un tejido industrial robusto y puntero. Yo personalmente me alegro de que haya más investigadoras, pero no es motivo de gozo que por cada investigador (mujer) contratadao hayan sido despedidos 6 investigadores (hombres) y es que el desarrollo de Andalucía no es una cuestión de sexos, mas bien de hechos...